Lo mejor que encontramos mi mujer y yo en Cali y en Bogotá fueron su gente. Desde el primer taxista al último camarero/a, todo fueron atenciones. Sin duda, tanto prejuicios sobre las naciones y sus personas, poco ayuda a relacionarse con ellas y a conocerlos mejor. Es más, los europeos tenemos mucho que aprender de nuestros hermanos sudamericanos, que no sólo nos aventajan en educación y humanidad, sino también en formación.
LOS ORGANIZADORES: HENRY CARACAS Y JOHNNY RAMIREZ
A TODA ESTA GENTE MARAVILLOSA: MUCHAS GRACIAS!!